14 de agosto de 2012

¿Taberna o "contubernio"?

Quien conoce bien la villa de Mombeltrán ya sabrá algo que el intrépido visitante -forastero- es incapaz de percibir, y es que se trata de un lugar donde el "estado de derecho" no existe (no al menos en el ámbito administrativo).

Sería demasiado extenso contar ahora todas las hazañas de alcalde de esta nunca bien ponderada Villa (también conocido en algunos foros de Internet como el "Alcalde de los barros y los lodos" ¿por qué sera?) pero de lo que no hay duda es que el Sr. Alcalde, salvo para salir en TV, no se toma demasiadas molestias para garantizar los derechos (fundamentales) de algunos vecinos de este pueblo. Es más, hasta el momento "se ha fumado un puro" con las numerosas reclamaciones que le han presentado varios vecinos del barrio de "El Palomar", que llevan años padeciendo la situación irregular del restaurante "La Taberna del Villano" (más conocido como Restaurante Esperanza) y los ruidos que este negocio viene generando desde hace 20 años.



Y es que, sólo si media algún "negocio" parece que el Sr. Alcalde si reacciona... ¿será porque es el principal proveedor de pan de la citada taberna?.



Si la Guardia Civil "se dignara" pasarse una noche (preferiblemente en fin de semana) por "La Taberna", seguro que se llevaba alguna sorpresa desagradable.


Para muestra, algunas de las normas vulneradas por este establecimiento: Ley 5/2009, de 4 de junio, del Ruido de Castilla y León, por mantener abiertas sus puertas de acceso superando los valores límite de niveles sonoros establecidos para un área "levemente ruidosa" (Tipo 2), según las vigentes normas urbanísticas municipales (Boletín Oficial de Ávila, 15/03/2004) que establecen como uso principal para la zona afectada (Nº2 "ensanche de casco") el de vivienda.
Orden IYJ/689/2010, de 12 de mayo, por la que se determina el horario de los espectáculos públicos y actividades recreativas que se desarrollen en los establecimientos públicos, instalaciones y espacios abiertos de la Comunidad de Castilla y León, por por superar con creces los horarios de apertura y cierre de los establecimientos públicos de su categoría.

¡Fuerza y honor!
Miguel de Sanjuán